jueves, 4 de mayo de 2017

[Consejo] El ABC para tener una lectura más productiva

Tener un proceso estructurado para registrar ideas de tus lecturas facilita la retención y por ende tu crecimiento 


¿Te ha ocurrido que no recuerdas las ideas importantes de algún libro que leíste? ¿Cómo podrías mejorar tus notas y además crecer después de leer un buen libro? En esta publicación quiero presentarte un proceso que he ido perfeccionando a lo largo de los años y que me ha facilitado la toma de notas, la retención de información y la posterior preparación de presentaciones, reseñas, resúmenes y mucho más.

¿Quieres aprovechar al máximo tu lectura? Este artículo es para ti.




¿Te ha pasado que lees un libro y años después no recuerdas muchos de los conceptos de tu lectura? ¿Tal vez te mataste leyendo algún material por tu profesión pero es como si nunca lo hubieras tenido en tus manos? ¿Tal vez lees una novela y cuando quieres leer la secuela correspondiente te ves obligado a leer nuevamente el inicial pues olvidaste mucho de la historia o de los personajes?

Durante años perdí mucho tiempo por culpa de no contar con un proceso claro para tomar notas después de mis lecturas, y eso generó un costo muy grande en mi productividad. ¿Cuántas horas pude haber perdido releyendo, reaprendiendo ciertos conceptos, y por ende quitándome la oportunidad de aprender un poco más?

Pero desde el año 2015 (hace relativamente poco), comencé a cambiar mi forma de lectura y comencé a tomar notas de forma más estructurada. Antes de ello, tal vez lo hacía pero no de la forma correcta. Desde que comencé con este proceso, podría decirse que mi productividad en términos de lectura ha aumentado significativamente:

  • No tengo que releer un libro a menos que yo quiera hacerlo. 
  • Tengo mis notas bien estructuradas y fáciles de consultar para cualquier tipo de reseña, presentación, conferencia o investigación. 
  • Retengo mucho más de lo que leo, permitiendo que lo que aprenda realmente se interiorice en mi ser. 
Y es por eso que quiero compartir este proceso contigo, mi lector de LibroMagno.com, pues aunque no es algo vital en la lectura, puedo asegurarte que te ayudará mucho en el proceso de hacer tu lectura más productiva.

Cabe aclarar que sigo batallando y aprendiendo, y por lo tanto es un proceso dinámico que va mejorando conforme pasa el tiempo, así que cualquier comentario tuyo será bienvenido.

A este proceso lo he llamado MAGNO ® (nombre que está en proceso de registro). Espero te sea útil.

El ABC de la lectura


No importa si lees una de las historias de Harry Potter, una novela romántica, un libro de liderazgo o un tratado académico, si quieres aprovechar al máximo la lectura es obligatorio que sepas retener lo leído, y aunque hay mucha literatura formal al respecto (que compartiré en otras publicaciones) es innegable que necesitamos un proceso para crecer como lectores.

Mi proceso personal (que he construido con mi experiencia y algunas lecturas que he hecho) funciona en tres pasos muy sencillos que detallaré a lo largo de este artículo:

  • Preparación (antes de la lectura). 
  • Inmersión (durante la lectura). 
  • Consolidación (después de la lectura). 


El primer paso: Preparación ¡Alístate para leer! 



La preparación es lo que ocurre antes de que comiences a leer. Es esa etapa previa donde recibes toda la información clave para comenzar tu viaje literario. De esta etapa en gran medida depende el cómo abordarás tu lectura.

Cuando voy a leer un libro, hago 5 cosas esenciales:

  1. Leer la portada, contraportada, y portadas interiores del libro. Esto no solo nos ubica en el universo del libro, sino que además nos permite conocer algo del autor. 
  2. Revisar el género de la obra (yo los tengo agrupados en Biografías e Historia, Creatividad, Crecimiento personal, Literatura y ficción, Negocios o Tecnología pero tú puedes definir los géneros que quieras). 
  3. Adicional al género trato de identificar el tipo de lectura con respecto a lo que quiero en mi vida (Mira aquí los tipos de lectura que no pueden faltar). Esto me permite definir claramente lo que espero del libro y la forma como lo abordaré. 
  4. Reviso detalles como el año de publicación, editorial, permisos de reproducción, etc., esto permite que pueda tener una idea del contexto del libro, más cualquier observación importante que deba considerar. 
  5. Adicionalmente reviso la tabla de contenido, pues aunque esto no es tan relevante en libros como una novela, sí es cierto que para un libro de no-ficción va a facilitar la toma de notas. 
Al finalizar la preparación, ya tengo una idea muy clara de lo que voy a leer, y tengo una estructura en mente de la obra y de su autor.


El segundo paso: Inmersión en la obra (¡Es la lectura misma!) 


Aquí es donde comienzo realmente la lectura, y el objetivo primordial es crecer y gozar mientras leo cada libro.

¿Tomar notas conforme se lee o tomar notas después de terminar un capítulo o el libro completo? Realmente depende mucho del libro que se está leyendo, y por eso diría que hay dos escenarios principales:

  • Como regla general, si el libro es una novela no tomar notas. En Los libros de ficción, cuyo propósito primordial es disfrutarlos, la norma general es no tomar notas mientras leo, pues afectaría el ritmo de la lectura y la inmersión en el relato. Lo único que sí hago es subrayar una que otra frase importante, pero nada más.
  • Para el resto de libros, se toman notas en forma de resumen. Para libros de cualquiera de los demás tipos de lectura, construyo un resumen conforme voy leyendo. Subrayo, tomo notas de ideas importantes, trato de escribir las ideas del autor en mis palabras, hago mapas gráficos de ciertos conceptos. En general, hago el resumen por capítulo (para mantener la estructura del libro original). Adicionalmente, siempre que termino cada capítulo, trato de escribir en una frase ¿qué me llevo del capítulo para mi vida? 

Por supuesto, estos son simples lineamientos generales, pues cada libro es una aventura distinta y por eso me he visto haciendo mapas gráficos de personajes de una novela, o respondiendo ejercicios que el autor coloca en un capítulo de una obra determinada. Al final de cuentas no hay fórmulas, solo lineamientos generales.

Lo realmente importante es que la experiencia de leer sea una experiencia de inmersión realmente completa de la siguiente forma:

  • M: Medita en lo que lees.
  • A: Anota ideas relevantes.
  • G: Goza cada momento de la experiencia. 
  • N: Nutre tu vida con lo que aprendes.
  • O: Organiza para luego recordar. 

¿Ves el proceso MAGNO?



El tercer paso: Consolidación de lo leído ¡El momento de plasmar!


No importa el género del libro, desde que definí este proceso he comenzado a hacer algo después de terminar la lectura y es construir un documento de cierre de mi lectura. Aunque es una plantilla que voy mejorando conforme avanza el tiempo, dicha plantilla es una clase de "hoja de vida" del libro, que me permite recordar rápidamente cualquier obra que he leído, y además construir luego artículos como reseñas, resúmenes o conferencias.

La idea de usar una plantilla permite que luego cuando consultes la información, toda tenga la misma estructura ahorrándote tiempo y aumentando la retención de las ideas.

¿Qué contenido debe tener dicha plantilla? 


Actualmente tengo seis elementos esenciales en el documento que construyo después de cada lectura:

  1. Información básica
  2. Resumen ejecutivo. ¿Cómo resumirías la propuesta de valor del autor y su argumento principal? La idea es construir un discurso de ascensor en menos de un minuto (máximo un párrafo en el que podrías describir lo que el libro aporta). 
  3. Personajes esenciales.
  4. Principales ideas. El objetivo es ilustrar los principales conceptos extraídos del libro (aquí pueden haber títulos, subtítulos, etc.) y debe tener como base lo que se ha subrayado o ideas construidas conforme se va leyendo. Esto no es un resumen, esto es una lista de principales ideas (no hay necesidad de una excesiva redacción, sino de una muy completa esquematización). 
  5. Desacuerdos y faltantes
    • ¿Hay desacuerdos con el autor? ¿Cuáles? Esto estimula la conciencia crítica aunque es bueno enfatizar que lo importante es ser constructivos y no destructivos en lo que recordamos de un libro.
    • ¿Qué faltó en el libro? Esto sirve para posibles secuelas, investigaciones o demás. 
  6. 1 a 5 Lecciones esenciales. La idea es pensar en qué cosas me llevo del libro para mi vida. Aunque hay libros que tienen más de cinco lecciones el objetivo es solo mencionar las más relevantes. 
  7. Citas ¿Hay alguna frase que vale la pena recordar o compartir? Esto ayuda a preparar posteriores presentaciones, resúmenes, reseñas, etc. 
¿Qué sería lo ideal? Que el contenido de este documento tenga entre 1 y 3 páginas. Al final, tendrás una hoja de vida de tu libro que puedes consultar en cualquier momento, después de haber leído.

¿Cómo almacenar dicha información? 


Tal vez te diste cuenta de que la última letra del proceso MAGNO ® es la O de Organizar ¿Por qué? Porque la idea es que estos documentos se almacenen de forma adecuada y además que permitan una búsqueda fácil a lo largo del tiempo. Al archivarlos y tenerlos en un registro para posteriores consultas te permitirá aprender más y preparar otros materiales.

Si tomas estas notas de manera manual, te aconsejo tener una carpeta donde sea fácil acceder a cualquiera de ellos. Si por el contrario, eres como yo y eres un poco más digital, te aconsejo tomar nota en herramientas como OneNote o Evernote. Esto te permite buscar luego a través de todas tus notas, para buscar una idea, un autor o una frase y además acceder desde múltiples dispositivos.

¿Por qué las reseñas de LibroMagno.com no siguen este formato? 


Posiblemente te estés preguntando porque las reseñas de LibroMagno.com no siguen la estructura de la plantilla que he descrito. La razón es más simple de lo que crees: Esta plantilla no es para hacer reseñas, sino para capturar ideas. Si vieras mis notas de algunos libros verías que cuento mucho detalle que no tendría sentido en una reseña (como por ejemplo, quién es el asesino en una novela), además del hecho de que no tienen mucho esfuerzo en estar bien redactadas, pues son simplemente colecciones de ideas para luego si construir las reseñas.


Una metodología es esencial para hacer tu lectura más productiva


Sin lugar a dudas, la lectura es una de las actividades más extraordinarias que pueden existir, pero el qué tan productivo es tu lectura depende grandemente de tu intencionalidad, y solo puedes ser intencional si tienes un proceso claro para hacer las cosas, por eso en esta publicación quise presentarte una metodología de tres pasos (preparación, inmersión y consolidación), una intencionalidad en la lectura (MAGNO: Meditar, Anotar, Gozar, Nutrir y Organizar) y una plantilla para consolidar tus notas e ideas. Este fue el ABC para hacer de tu lectura más productiva.

Algo interesante es que conforme sigues un proceso como el aquí presentado comenzarás a retener más de lo que lees, pues tienes un proceso intencional, tienes una estructura para tomar notas y eso fortalece mucho más tu cerebro (te lo digo por experiencia propia).

Espero que esta publicación te haya sido útil, y me encantaría ver tus comentarios, pues el proceso aquí descrito está siempre está sujeto a mejora continua

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